Editor’s note: This article is also published in English on Glasstire. Find that here.
Nota del editor: Este artículo se publicó originalmente en inglés en Glasstire el 10 de febrero del 2025.
Traducción de Yolanda Fauvet y Viera Khovliáguina.
Como parte de la alianza de Glasstire con Art21, la organización conocida por producir documentales premiados sobre las vidas y el trabajo de algunas y algunos de los artistas contemporáneos más conocidos a nivel mundial, estaremos copublicando una pequeña selección de filmes enfocados en artistas que radican en Texas o que tienen una conexión significativa con el estado.

Production still from “Tanya Aguiñiga in ‘Borderlands,'” an extended presentation of the artist’s segment from “Art in the Twenty-First Century,” Season 10. © Art21, Inc
La artista binacional Tanya Aguiñiga le abre paso al poder del arte para transformar la frontera entre México y Estados Unidos de un sitio de trauma a un espacio creativo para la sanación personal y la expresión colectiva. La artista refleja la hibridación cultural y la comunidad de la zona fronteriza al hablar de su crianza en Tijuana, de su formación como diseñadora y artesana de muebles y de sus inicios artísticos con el colectivo Border Art Workshop/Taller de Arte Fronterizo. Desde su estudio, Aguiñiga y su equipo producen objetos como joyería y artículos para el hogar para financiar sus proyectos, talleres y performances cimentados en la justicia social. La artista regresa al lugar de uno de estos proyectos, titulado Border Quipu/Quipu Fronterizo, donde ella y su equipo grabaron las historias de los trabajadores que se trasladan diariamente de Tijuana a San Diego. Este segmento también sigue a Aguiñiga mientras se prepara para Metabolizing the Border [Metabolizar la frontera], un performance y ajuste de cuentas personal con el dolor causado por el muro fronterizo. El trabajo demanda proeza física: la artista camina a lo largo del muro fronterizo y porta un traje de vidrio que está diseñado para romperse; con esta acción busca expresar los efectos del muro como heridas en su cuerpo y simbolizar la lucha de la experiencia migrante. Aguiñiga demuestra cómo el arte puede ser tanto “una salida física y emocional” a nivel personal como un vehículo para ayudar a otras personas a “empatizar y pensar en cómo estamos conectados los unos con los otros”.
Puedes ver el cortometraje abajo. Encuentra esta y otras producciones en la página de Art21 y en su canal de YouTube.